Ribadelago
Don Quijote y Sancho se entraron por el mesmo bosque donde vieron se había entrado la pastora Marcela y habiendo andado más de dos hora …. vinieron a parar a un prado lleno de fresca yerba, junto del cual corría un arroyo apacible y fresco …
Andaban por aquel valle paciendo una manada de hacas Galicianas de unos arrieros Yangueses, gallegos (32)
(32) Don Quijote. I, XV, 113.
42.10578ºN, 6.75771ºW